lunes, septiembre 03, 2012

Campos de reeducación en China

Por medio de la Red de Acciones Urgentes de Amnistía Internacional, he tenido conocimiento de unas “curiosas” instituciones que el gobierno chino apoya y subvenciona abiertamente: los campos de Reeducación o Laogai en su lengua. Pero antes de seguir, me gustaría hacer un inciso sobre este movimiento de Amnistía Internacional. La red de acciones urgentes es una lista de correo (gratuita) a la que te puedes adherir aquí: http://www.es.amnesty.org/rau/

Lo que tienes que hacer es simple y fácil. Desgraciadamente, cada semana recibirás al menos un email con alguna situación que vulnera los derechos humanos en el mundo. Simplemente hay que escribir un email/carta al gobierno del país pidiendo que dichos derechos sean respetados. Con esta pequeña acción para una persona, se suman cientos de miles de peticiones, que muchas veces logran avivar la esperanza de otros seres humanos. Esta gente trabaja muy bien y os animo a todos a participar.

Bueno siguiendo con el tema principal, la semana pasada recibí un email de AI sobre los campos de reeducación en China ¿y que es esto que tiene un nombre tan desagradable? Pues en efecto, es un concepto deplorable ampliamente implantado en este país. Lo más parecido a estos campos son los campos de concentración nazis. Instalaciones donde personas que no están de acuerdo con el sistema (¡ojo aquí no hay delincuentes; los delincuentes van a prisiones convencionales!) sufren todo tipo de trato vejatorio, torturas y hasta la muerte con el fin de hacerles “arrepentirse de sus actos”. Podemos encontrarnos, practicantes de otras religiones, escritores, actores, librepensadores... Todas estas personas son susceptibles de acabar en los “populares” campos de reeducación. Personas cuyo único “delito” ha sido el de no ser como son todos. Y yo me pregunto ¿como es posible que un país como China, que alardea de ser un país abierto, cosmopolita y moderno, fomente este tipo de nueva esclavitud? Fácil, porque la realidad es que China es un país atrasado, lleno de violenca y cuya feroz dictadura vulnera una y otra vez los derechos humanos... ¡IMPUNEMENTE! Que nadie se engañe; China no es un país libre.

A continuación transcribo literalmente, último hecho denunciado por Amnistía Internacional. Es tan real como escalofriante:

“La practicante de Falun Gong Wang Xiuqing y su hija, Qin Hailong, han sido torturadas en el campo de reeducación por el trabajo de Qianjin, en la provincia china de Shandong. Las dos mujeres llevan desde enero detenidas sin juicio en el campo. Según informan ex detenidos, Wang Xiuqing y su hija, Qin Hailong, han sido torturadas en el campo de reeducación por el trabajo de Qianjin. Al llegar al campo, a las dos las pusieron en régimen de incomunicación durante más de un mes. El 18 de agosto, la hermana mayor de Qin Hailong, Qin Rongqian, fue al campo para verlas. Primero visitó a Wang Xiuqing. Esta le dijo que Qin Hailong había sido torturada y maltratada después de la última visita de Qin Rongqian al campo, el 3 de agosto, y que las torturas -consistentes en darle golpes con porras eléctricas, propinarle puñetazos y patadas por todo el cuerpo y arrojarla al suelo con tanta fuerza que le cortaba la respiración- habían continuado hasta el 17 de agosto. Wang Xiuqing mencionó los nombres de dos funcionarios que habían participado activamente en las torturas, Huo Shuping y Wu Baoyun, jefe y subjefe de la Segunda Brigada del campo, una de las dos en las que están divididos los internos. Wang Xiuqing afirmó que Qin Hailong había sido torturada por negarse a firmar un documento reconociendo su "culpa", pidiendo "ayuda" para su "reeducación" y prometiendo abjurar de sus creencias. Su madre había firmado previamente el documento porque "no podía soportarlo más", dijo, en referencia a su tortura. En un principio, los funcionarios del campo de reeducación por el trabajo se negaron a permitir a Qin Rongqian entrevistarse con Qin Hailong después de ver a su madre, a pesar de que tenía derecho a hacerlo según la normativa de la reeducación por el trabajo. Qin Rongqian insistió en ver a su hermana, afirmando que no se iría hasta haberlo hecho, y al final autorizaron la visita. Según informa Qin Rongqian, Qin Hailong tenía costras provocadas por las descargas eléctricas, no podía mantenerse erguida, caminaba con dificultad, se sostenía la cadera con el brazo y tenía una mueca de dolor en el rostro. A Qin Hailong y Wang Xiuqing se les se asignaron 18 meses de reeducación por el trabajo el pasado noviembre, después de los grandes esfuerzos de la familia por conseguir reparación jurídica por la muerte del padre de Qin Hailong y esposo de Wang Xiuqing, Qin Yueming, en la cárcel de Jiamusi en febrero de 2011, a pesar de que las autoridades les habían advertido que dejaran de insistir. Qin Yueming había sido encarcelado por sus creencias religiosas, y se cree que fue torturado hasta morir. Su familia afirma que su cadáver presentaba numerosos hematomas y que sangraba por la nariz. Según las autoridades penitenciarias, su muerte se había debido a un ataque al corazón.”

Repito este tipo de acciones son absolutamente legales en China. Y por si alguien se ha quedado con alguna duda de lo que los chinos hacen en estos “campos de reeducación” recomiendo ver el documental de Melissa Chan (que por cierto ha sido expulsada del país, así de amigables son los chinos) titulado: Slavery: A 21st Century Evil – Prison Slaves (solo en Inglés) http://shanghaiist.com/2012/05/08/watch_the_aljazeera_documentary_tha.php En el se demuestra como muchos de los productos made in China que compramos a diario, son fabricados por prisioneros / esclavos de estos campos. Desde zapatos a electrónica. Con jornadas maratonianas de 7 de la mañana a 12 de la noche. Sin apenas comer y por supuesto sin sueldo. De ahí el precio tan barato de las cosas (no existe una formula mágica para reducir el coste un 80%; bueno, si esta, el esclavismo) Una fuerza de trabajo potencial de ¡¡5 millones de presos!! En el documental salen comentarios de ex-convictos; hablan de que por ejemplo podían llegar a producir 10.000 pares de zapatos ¡en un día! Estos zapatos son vendidos a Europa y USA como material legalmente fabricado. La embajada China ha callado ante las preguntas de los reporteros.

Como conclusión, volver a recomendaros participar en la red de acciones urgentes de Amnistía Internacional. Tenemos que luchar con cualquier arma contra este tipo de atrocidades. Y por supuesto, no apoyar nada que tenga que ver con el gobierno Chino. Es una dictadura en toda regla que mata y tortura a millones de personas cada año. Yendo un poco más allá, cuando compremos un producto Made In China, meditemos en el porqué de su bajo precio. Hay muchas posibilidades de que estemos favoreciendo indirectamente a la esclavitud; ante este riesgo, sinceramente, creo que es mejor optar por un producto de otro país que rechace tajantemente estas prácticas tan aberrantes.