jueves, agosto 25, 2005

Living in London during one week (Capitulo 4)

Viernes ya dispuestos para el fin de semana, ya podriamos gozar mas de la compañia de Dave pero el tiempo aparecio bastante nublado, pero bueno, seguiamos conformandonos porque mientras no lloviese pues podiamos hacer cosas. Siguiendo las actividades de la empresa de Dave pues ese dia tocaba barbacoa cerca del lago del parque empresarial, asi que nos levantamos y fuimos para alla. Tenian hamburguesas, perritos calientes, ensaladas, muchas cosas, pagabas y te ibas a las mesas para degustar la barbacoa. No solo tenian puesta la barbacoa, pusieron futbolines donde hubo un duelo en la cumbre, un España - Francia, Dave y yo eramos el combinado español, dejamos el pabellón patrio bien alto y esta vez no sucumbimos en los cuartos de final. Tambien pusieron juegos de encajar bloques, un tenis con un palo y un concurso de pintar camisetas. Por cierto ayer se me olvido comentar que el profesor de guitarra de el dia anterior era clavado a Chris Martin, el cantante de Coldplay.

Por la tarde Dave tenia que trabajar, asi que nos inventamos Raul y yo irnos al mercadillo de Nothing Hill. Cogimos un bus en Gunnersbury y fuimos hasta la estacion de Shepherd Bush, queria pasar por ahi porque fue uno de los lugares donde pusieron una de las bombas en el segundo intento de ataque terrorista que menos mal que no fructifico. El sitio es raro, muchas razas alli mezcladas, arabes, gente de El Este de Europa, me recordo un poco a Lavapies. Desde alli cogimos el metro hasta Nothing Hill Gate.

Nothing Hill se ha convertido en uno de los barrios mas elitistas de Londres pero a la vez es un barrio alternativo, lo primero que nos sorprendio fueron las casas victorianas que rondan por alli, luego tambien hay pequeños edificios de colores, uno era muy simpatico porque arriba ponia 'I loved you', me gustaria saber la historia de porque esa frase, veiamos coches carisimos y nos encaminamos buscando Portobello Road. No fue dificil encontrarlo y nada mas pasar a la calle ya estan colocados los puestos del mercadillo, vendian de todo, desde balones del Manchester United, a antiguayas, te y mucha ropa. Antes de llegar a Portobello te topas con la tienda del prestigioso diseñador Paul Smith, al lado una tienda de lenceria que estaba super currada. Yo iba con la intencion de comprar cosas y efectivamente pues compre cosas, me lleve una chaqueta de cuero de una de las tiendas de Portobello, el vendedor fue muy habil porque la chaqueta estaba bien, empezo a bajar el precio y cuando nos ibamos a ir me hizo una ultima oferta que me parecio bien, asi que me la lleve. Entramos a varias tiendas de vinilos que tenian buena pinta pero que eran carisimos, observamos la fruta que vendian en los puestos y llegamos hasta el final de Portobello donde vendian cosas relacionadas con Lisboa, un viejo le vendio a Raul unos libros de la editorial Penguin por 1 pound.

Decidimos tomarnos un descanso y entramos en uno de los numerosos cafes que estan al lado de los puestos del mercadillo, era un sitio muy comodo con sofas, buena musica (un rato pusieron musica latina pero no Ricki Martin) y una decoracion pop art, por pedirme un Cherry con vodka me engañaron porque me gaste un paston en una cosa que era como un chupito de pequeño, pero bueno, al menos sabia bien. Empezo a llover y solo me dio tiempo a observar una peluqueria que era muy rara, asi pintada con graffitis y peluqueros poco convencionales.

Volvimos a casa que Dave ya habia salido de trabajar e ibamos a quemar la noche londinense de el viernes. Teniamos pensado salir por Old Street pero nos recomendaron un sitio de Candem Town, asi que fuimos para alla. Ante nosotros estaba el barrio mas alternativo de Londres, la estacion de metro ya parecia un garito en si. Empezamos con unas pintas en el pub 'The world is end', un super pub gigantesco con dos plantas donde ponian musica rock bastante buena, luego de madrugada abajo de el pub esta el Underworld donde se organizan fiestas. Tras las pintas decidimos que habia que cenar que sino la noche se haria muy larga, nos encaminamos hacia el puente de Candem y justo pasado el puente hay un pub donde nos zampamos unas costillas a la orilla de el rio, estaban de vicio esas costillas. Quedamos con Laura y una amiga suya en Candem y Raul descubrio un sitio que habia mucha gente, incluso estaban en la calle. Las copas eran alli muy baratas, el sitio se llama de 'The Good Mixer', esta al lado de Arlington Road, tambien buena musica, lo recomiendo, muy buen ambiente. Como era viernes pues el pub lo cerraban a las 12, dejaban una hora mas de lo habitual.

Para terminar pues fuimos a el sitio que Marta me habia recomendado que fuese, era la discoteca 'Electric Ballroom', 7 pounds por entrar pero bueno alli esa es la regla pero una vez dentro nos quedamos sorprendidos, era una discoteca heavy, imaginaros una discoteca bastante grande llena de tipos con pelos largos, punkis, tias siniestras super raras botando al son de Metallica y eso era lo mas suavecito, al fondo en dos jaulas las gogos se retorcian, en la planta 2 habia un futbolin super cascado y otra sala que todavia era mas heavy con una DJ femenina, disfrute de la version de 'Whole lotta Rosie' pero eso era un infierno de calor, asi que nos bajamos otra vez. Cuando ya estaba un poco harto de tanto heavy se obro el milagro y cambiaron de DJ, ahora se puso a los platos un tio muy chungo que no paraba de moverse pero que puso musica buenisima, por ejemplo Pearl Jam, al ser mas tarde el tono erotico de como la gogos bailaban iba subiendo de temperatura, numeritos lesbicos incluidos, muy buenas las caras de Dave y Raul mirando como las gogos se comian los morros.

Hacia las 3 de la madrugada con bastantes cubatas de ron jamaicano en el cuerpo y un paston gastado decidimos irnos, en la puerta un monton de peña que te ofrecia servicio de taxi para ir a casa pero optamos por irnos en transporte publico, no sin antes Dave y Raul zamparse un super hot dog, en un bus llegamos a Trafalgar Square y una vez alli otro autobus nos dejaba al lado de casa. Tardamos mogollon pero bueno, no teniamos prisa, Laura y yo estuvimos hablando bastante rato de la ciudad, de cuando se volvera para España y asi la cosa se hace amena y no se hace nada pesado. Tras un dia tan agotador no tardamos en dorminos, al dia siguiente no teniamos nada pensado pero seguro que algo se nos ocurriria, muchas cosas tiene Londres para que uno se aburra.